Lo que puedes llegar a descubrir, a sentir….

La Natividad, la Navidad encierra embrujo.

Para mí es como poner más los pies en el suelo y hacer revisión de todo el año viendo cómo hemos evolucionado, dónde nos hemos equivocado….muchísimos planteamientos que pueden surgir dependiendo de la situación de cada persona.

No significa vivir sin agarrar la realidad, sino al contrario aún aprietas más las riendas del camino atesorando el día a día y disfrutando de lo que nos toca.

Sin entusiasmo, ni emoción…no se vislumbra ningún atractivo en la rutina diaria, en celebraciones, en pequeños detalles…sólo nos dará igual que pase lo que pase, que no pase…sólo somos trenes que circulan por el barro.

Despertar a oportunidades: de no continuar dando puñetazos, ni dando la espalda a lo que tiene ángel, a lo que puede ser especial.

¡Busca borradores de demasiada tristeza, de pena cimentada, adorna tu dolor con inquebrantable fe…cuelga nuevos brindis del árbol de tu alma…y prueba a sentir como nunca has sentido!